Es increíble la cantidad de artículos que han sido escritos acerca de Dr. Martin. En ellos quedó documentado su compromiso para resolver problemas de enfermedades en céspedes y su habilidad para proveer una sensación de calma durante reuniones de comisión agitadas en las que se volvían algo tóxicas. Por Alejandro Canegallo
La entrada Dr. S. Bruce Martin, su fallecimiento se publicó primero en AAG.
Todos coinciden, la industria del césped, los Superintendentes de golf, colegas de la universidad absolutamente todos dirían que esto es verdad, del mismo modo que debido a su naturaleza humilde, Bruce Martin se sentiría algo avergonzado por toda esta atención.
Me he estado preguntando en estos días si era posible agregar algo que valiera la pena a todo lo que se ha dicho acerca del legado de Dr. Martin. Aquí está mi esfuerzo como su estudiante agradecido.
Primero que nada, Dr. Martin tal como era conocido y reconocido en el ámbito académico y en las reuniones técnicas, siempre fue Bruce. Ya sea trabajando en el campo experimental, en el laboratorio, en una cancha de golf o en el día a día siempre fue Bruce para nosotros y para todo el que tuviera contacto con él, un hombre con la humildad de los sabios, que consideraba un privilegio el poder transmitir sus conocimientos y nos inculcaba la importancia de hacer lo mismo.
Su responsabilidad en Clemson era la de investigar y enseñar acerca de enfermedades en céspedes, sin embargo, sus lecciones de vida fueron igual o mucho más importantes. Tres de ellas se destacaban para mi… Integridad, Objetividad y Persistencia. Bruce era inflexible. Integridad, Objetividad y Persistencia eran características personales requeridas si esperábamos tener éxito primero como sus estudiantes. Luego Bruce también esperaba que nosotros fuéramos también inflexibles y mantengamos esos estándares en el máximo nivel durante nuestras carreras profesionales.
Bruce fue un mentor generoso. Creo que todos hemos tenido a alguien que nos dio alguna vez una oportunidad o asistencia que nos ayudó a abrir puertas durante nuestro camino en la vida. Para aquellos que querían mejorar su educación, que mostraban pasión por la ciencia y el trabajo duro, que mostraban curiosidad, o querían ser superintendentes de golf, o asistentes en investigación o lo que sea: Bruce tenía una paciencia infinita y siempre estuvo para alentar y ayudar a preparar nuestro camino.
Bruce visitó la Argentina en numerosas oportunidades, enseñándonos a entender las enfermedades del césped, lo cual se reflejó en la importante mejora de nuestros campos.
Tenemos una deuda de gratitud con la memoria de Bruce, por lo que somos, por lo que hemos logrado y por lo que vamos a lograr.
Descansa en paz Maestro, te vamos a extrañar querido amigo.
Dr. S. Bruce Martin. 9 de enero 1954 / 15 de octubre 2025.
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